¿Sabías que…? Son muchas las personas que no saben que están sufriendo ansiedad. Cuanto antes se detecta, más fácil es ponerle freno, ya que en ocasiones puede llegar a agravarse y convertirse en un trastorno. A continuación te ofrecemos una serie de pautas que resultan ventajosas para deshacerte de ella con constancia y buenos hábitos.
¿QUÉ ES LA ANSIEDAD?
La ansiedad es un mecanismo defensivo que responde a situaciones amenazantes para nuestro organismo, haciendo que esté alerta para dar respuesta a situaciones poco comunes o generadoras de riesgo.
Aún siendo esto cierto, la ansiedad es comúnmente conocida por ser un estado mental que provoca en las personas gran inquietud, angustia y excitación, produciendo en el ser humano inestabilidad emocional. Es en estos casos cuando debe tratarse este desequilibrio, dado que ha dejado de trabajar positivamente para nuestro organismo y está provocando el efecto contrario sobre nuestra salud.
¿CÓMO SE MANIFIESTA LA ANSIEDAD?
La sintomatología es variada y abarca desde manifestaciones físicas o psicológicas a sociales, conductuales o cognitivas. A continuación hacemos la clasificación detallando un poco más la forma en la que la ansiedad puede manifestarse en nuestro cuerpo:
- Síntomas físicos: falta de aire, tensión muscular, vómitos y molestias digestivas, temblores, taquicardias, etc.
- Síntomas psicológicos: inseguridad, confusión, sensación de peligro, irritabilidad, agobio, incertidumbre o inquietud, entre otros.
- Síntomas sociales: temor a exponer opiniones personales o entablar conversaciones, así como dificultad a la hora de conseguir mantener diálogos fluidos.
- Síntomas conductuales: actuar con torpeza y bloqueo, rigidez y tensión en la expresión corporal, dificultades para estar en estado calmado, etc.
- Síntomas cognitivos: problemas de concentración, atención y memoria.
CINCO HÁBITOS SALUDABLES QUE TE AYUDARÁN A TRATAR LA ANSIEDAD
A continuación te ofrecemos cinco pautas que resultan ventajosas para disminuir la ansiedad.
- Regular el sueño y la alimentación, es muy importante marcarse unas rutinas diarias saludables, otorgándole a nuestro cuerpo el descanso suficiente para afrontar el día, así como proporcionarle una dieta rica en vitaminas y nutrientes. En el ritmo rápido de vida que llevamos nos acostumbramos a una alimentación desordenada y unos horarios de sueño irregulares o demasiado cortos:
- una buena higiene del sueño facilitará que este sea reparador, lo que por si mismo reduce los niveles de ansiedad que podemos llegar a sentir durante el día,
- asimismo una dieta sana y equilibrada, y el organizar de forma ordenada nuestras comidas (no dejando grandes periodos de tiempo entre las mismas) facilitará que no bajen nuestros niveles de glucosa lo que prevendrá sentimientos de ansiedad.
- Relajación y meditación para calmar el cuerpo y la mente, resultando técnicas útiles tanto para tratar la ansiedad como para evitarla en el futuro. Practicar la atención plena, centrándonos en el momento presente, es una buena forma de centrarnos y no permitirle a nuestra mente que aumente la intensidad de nuestras preocupaciones.
- Ejercicio físico para evitar las tensiones y rigideces musculares, además de ser una forma imprescindible para la liberación de la mente y la desconexión con cualquier tipo de problema. Actividades sencillas como caminar o nadar, o practicar deportes que nos gusten y con los que disfrutemos, son potentes liberadores de ansiedad. La liberación de endorfinas y la relajación muscular que produce el hacer ejercicio pueden ser tus mayores aliados para vencer la ansiedad e incluso un estado de ánimo decaído.
- Actividades manuales que centren nuestra atención a la vez que nos hacen ver nuestra valía y desempeño. Concentrarte en entretenidas actividades tales como pintar, dibujar, tejer, manualidades…puede ayudarte a reducir la angustia. Al entrar en un estado de «flow»que se produce al estar inmersos en una actividad gratificante se reducirán tus senaciones de fatiga y aumentará tu sensación de autocompetencia.
- Mantener y crear vínculos sociales participando en conversaciones. El deporte y las actividades relajantes y manuales pueden ser una opción ideal para crear nuevos vínculos realizando labores que te gusten y satisfagan. Dedicar tiempo a la familia y amigos es fundamental para desconectar de nuestras preocupaciones diarias o sentir el apoyo necesario cuando lo necesitemos.
A pesar de que a veces resulta difícil darse cuenta de que se está padeciendo ansiedad, una vez se detecta podemos combatirlo mediante la realización de actividades fáciles y cotidianas como las que hemos mencionado en este post, Ítaca Psicólogos Coruña te ofrecerá los patrones que más se amolden a tu tipo de ansiedad para que así logres superarla de la mejor forma posible.